Sigmar Gabriel, presidente del Partido Socialdemócrata (SPD), anunció ayer que el 75,96% de los votos válidos del referéndum partidario fueron positivos, razón por la cual la firma del contrato de coalición (Koalitionsvertrag) entre el SPD y la Unión Demócrata-Cristiana (CDU) de la canciller Angela Merkel tiene via libre. Todo un triunfo para líder socialdemócrata quien venía golpeado luego de la derrota electoral de septiembre y de las críticas de algunos gremios del partido como los jóvenes de Jusos. Con el SI de los afiliados del partido, Gabriel demostró que la amplia mayoría de los socialdemócratas no solo lo apoya como líder sino que considera que los resultados de las negociaciones de coalición son positivos.
Sin embargo, en comunicación política siempre hay un margen para el contragolpe. Si bien todos los socialdemócratas se imaginaban una primera plana en la prensa sobre el aporte del SPD a la democracia interna de los partidos políticos, ilustrada por fotos de los festejos de la cúpula y los afiliados… se equivocaron:

¿Cómo se explica esto? Basicamente con dos palabras: Frau Merkel. Y ella está en la vereda de enfrente, con o sin gran coalición mediante. Ella es la quien mejor domina la actual escena política alemana. La comunicación es su fuerte. El reframing y la hegemonización de la agenda electoral son algunos ejemplos de ello. En esta oportunidad, aprovechándose de la ansiedad y desesperación de los periodistas por publicar posibles nombres para el próximo gabinete, Merkel soltó un rumor que le robó aquella merecida primera plana al SPD: La actual ministra de Trabajo, Ursula von der Leyen, será la primera ministra de Defensa mujer de la historia alemana. El impacto fue abrumador ya que es el partido conservador el que esta poniendo al frente de los soldados de Alemania a una mujer. Pero por otra parte, porque con esta decisión Merkel deja entrever que von der Leyen está entre sus cuadro políticos preferidos, lo que muchos medios no dudan en interpretar como la aparición del delfín de la canciller para el 2017.
Esta dinámica mediática que se manifiesta en los medios de comunicación en este caso concreto será la batalla diaria que tendrán que librar los miembros de esta nueva gran coalición. Si el SPD y Gabriel no se dejan eclipsar por Merkel, tienen serias posibilidades de volver a superar el 30% de los votos, ya que el desgaste de la CDU luego de unos 12 años en el poder no es gratis. Sin embargo, Merkel no es fácil y lo ha demostrado. Especialmente si se trata de comunicación. Y la política es comunicación.