Hamburg es la ciudad que conecta a Alemania con el comercio mundial. Su puerto es el más grande del país y el tercero de Europa. Para un país cuyo objetivo año a año es ser el campeón de las exportaciones (Exportweltmeister), Hamburg es fundamental.

Más allá de su valor desde el punto de vista comercial, esta ciudad también es fundamental en el mundo político. En especial, en el mundo socialdemócrata (SPD). Para un partido que no puede parar de recibir golpes, de caer en las encuestas, de perder elecciones, Hamburg es la panacea. La esperanza eterna. Una historia de éxito. Incluso por encima de Berlin.
Allí el SPD ha logrado sus mejores resultados electorales en muchas décadas. Logró superar el 40% de los votos en dos ocasiones (2011 y 2015) y gobernar en soledad durante un período. En síntesis, la socialdemocracia de Hamburg ha conseguido hitos casi imposibles para el Estado actual del partido. Es cierto, el SPD de la región es uno de los más poderosos, gobernó más de tres cuartos del tiempo desde 1950:
Solo quedan dos coaliciones entre socialdemócratas y verdes en todo Alemania a nivel regional. Una alianza, que hasta llegó a gobernar el país, es actualmente incapaz de conseguir la mayoría. Hamburg y Bremen son la excepción.
El parlamento actual refleja esa superioridad de la socialdemocracia en el número de escaños que dispone. Sin embargo, las encuestas actuales anuncian que la fragmentación, que se refleja en cada uno de los parlamentos alemanes, también llegará a esta ciudad.
En la última elección regional de 2015, el SPD, pese a perder algunos puntos porcentuales, obtuvo una victoria contundente:
Más allá del resultado socialdemócrata, en estas elecciones se destacó la pobre performance de la CDU, una de las peores de toda la historia en todas las regiones del país. Triste récord para los democristianos. Un último elemento a subrayar fue la baja participación electoral. La menor de la historia en esta Ciudad-Estado.
Pese a los buenos desempeños regionales, el SPD no pudo evitar perder casi 9 puntos en las últimas elecciones federales de 2017. El otro mayoritario, la CDU, también perdió votos (-5), confirmando así la tendencia general: el castigo a los mayoritarios.
En contraposición, los partidos minoritarios consiguieron grandes réditos electorales en 2017. Los verdes lograron su mejor resultado (13,9%), muy por encima del decepcionante 8,9% general. Los liberales (FDP) duplicaron su caudal electoral y llegaron a los dos dígitos. Finalmente, tanto la ultraderecha (AfD) como la izquierda (die Linke) pudieron mejorar sus performances de 2013 en más de tres puntos porcentuales.
Hamburg no posee una gran representación en el Bundestag. Es uno de los Estados Federales que menos escaños recibe: 16 bancas. Cinco de ellas le corresponden a los socialdemócratas, quienes lograron cinco de los siete mandatos directos que otorga la ciudad.
En el Bundesrat, o cámara alta, los partidos gobernantes se reparten las tres voces (Stimmen) disponibles:
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Foto de fondo en la portada: Hamburger Rathaus de Daniel Schwen (CC BY-SA 2.5), vía Wikimedia Commons.